Efectos del cambio climático en España.

El Instituto de Oceanografía alerta de las consecuencias del cambio climático. El ritmo de crecimiento del nivel del mar Mediterráneo se ha acelerado bruscamente en los últimos años, hasta alcanzar unos tres milímetros anuales, casi el doble que los registros que se conocieron en la última década del siglo XX. Junto a este aumento de nivel de agua, el calentamiento ( en torno a 0,8 grados en el último siglo) y una mayor salinidad de las principales consecuencias que el cambio climático tiene en el mar Mediterráneo y, si bien de momento no ha llegado a producir algunas alteraciones relevantes en el ecosistema porque la temperatura en las profundidades del mar apenas ha variado, su alcance futuro es imprevisible, según advierte una investigación del Instituto Español de Oceanografía.

A lo largo del siglo XX se ha estimado que el nivel del agua del Mediterráneo aumentó en torno a unos 20 centímetros y de mantenerse la tendencia actual volvería a incrementarse entre unos 30 y 35 centímetros en este siglo, aunque la materia no se presta a trazar unas ecuaciones exactas, entre 1950 y 1990, por ejemplo, hubo un descenso de nivel atribuible a un anómalo ascenso de la presión atmosférica.

Conocemos lo que ha ocurrido hasta ahora, pero no se puede saber lo que va a pasar y lo que ha pasado en diez años no tiene que pasar en los siguientes, explicaba el coordinador del estudio Cambio climático en el Mediterráneo español.

Los efectos de este crecimiento del nivel del mar serán muy diferentes según las zonas en función de las características geológicas y de la ocupación que haya tenido la costa. Si el nivel del mar sube en la vertical en una zona de acantilados, no suponen ningún problema; pero allí donde haya zonas de playa, deltas del río, o costas densamente construidas, lógicamente el impacto sobre las personas andaluzas y valencianas va a ser más importante.

El equipo investador previene contra el alarmismo y pretende que el estudio sirva de referencia para prevenir. hay que guardar un equilibrio entre los dos extremos, sería tan error pensar que no ocurre nada como que nos va a arrasar el agua, eso no va a ocurrir y puede producir un hartazgo alentar de una gran catástrofe, dijo uno de los investigadores.

Junto al estudio científico se presentó un resumen para gestores y responsables de políticas medioambientales en el que que se afirma que aunque ahora se redujeran las emisiones del dióxido de carbono hasta niveles de hace veinte años, el aumento de la temperatura y del nivel del mar seguirían creciendo en los próximos tres décadas igual que si no se hiciera nada porque el clima tiene su inercia.

El estudia recoge por primera vez datos oceanográficos y atmosféricos desde 1948 hasta el 2008 con la aplicacion de un sistema de observación pionero en Europa y que permite apreciar diversas oscilaciones periódicas. Parte de la importancia del estudio, según su coordinador, es esa perspectiva, porque hay muchos análisis parciales que pueden resultar engañosos o contradictorios. Por ejemplo, entre 1948 y 1970 hubo un enfriamiento del agua del Medterráneo, al que sucedió un periodo de fuerte ascenso. Hasta 2005, la temperatura en las aguas superficiales aumentó entre 0,12 y 0,5 grados.

Este hecho, provoca que de aquí al año 2050 el mar se comerá gran parte de las playas españolas. Según una encuesta realizada en San Sebastián, por la ola de calor producida en 2003 en Europa mató a más de 30.000 personas.

Este trabajo cuantifica el aumento de la temperatura media en nuestro país hacia el año 2100 en un máximo de siete grados y alerta de una disminución importante de las precipitaciones, si bien los efectos del cambio climático serán probablemente menores en todo el litoral. Las grandes afectadas son las zonas costeras, que se enfrentan al ascenso del nivel del mar.

Además de las muertes que está provocando las olas de calor, que cada año van a ser más fuertes, está provocando un grave desastre en las playas. Los científicos calculan que el nivel del mar ha subido una media de 2,5 milímetros anuales en la última década. Sólo eso, sin la aportación del deshielo acelerado de los glaciares y de la Antártida y Groenlandia, que supondrá una elevación de entre unos 15 y 20 centímetros hacia 2050.

Las playas del Cantábrico retrocederán por esta causa unos 15 metros; las del golfo de Cádiz, unos 10 metros, y las de Costa Brava, el sur de Canarias y de las islas Baleares, hasta unos 70 metros, según los estudios de los científicos.

En estas últimas zonas, además, a la subida del nivel del mar se sumarán cambios en la dirección del oleaje que harán que los arenales giren para colocarse de manera perpendicular a las olas, avanzando en un extremo y retrocediendo en otro.

La gente no querrá acetarlo y pedirá que se hagan vertidos de arena. Habrá sitios como la playa de La Concha, donde será la solución, pero no en otros casos. Algunas playas se perderán en algunas décadas, debido al aumento del nivel del mar.

En el Cantábrico, las olas serán más altas y el viento mucho más rápido, y eso, unido junto con la subida del mar, implicará un mayor riesgo de inundaciones temporales, aunque los cuatro metros de margen entre el ingremento de marea baja y alta, paliarán la situación.

Estos problemas están atacando más a nuestro país, desde hace una década. Estamos usando mucha cantidad de dióxido de carbono, gran cantidad de gases contaminantes, que están destruyendo la capa de ozono, y esto está provocando los graves problemas dicho anteriormente, como la subidas de mareas debido al deshielo de las zonas polares, la gran cantidad de muertes.

Según los científicos, como no hagamos nada inmediato, esto irá aumentando mucho más que en las pasadas décadas. Algunas ciudades del sur de España y del este se verán implicadas en menos de un siglo, ya que con el gran aumento, las ciudades quedarán inundadas debido al gran aumento del nivel del mar. Todo esto provocará una gran catástrofe en España, y tendrá una gran pérdida economica, y millones de seres vivos morirán.

Trabajo realizado por: Javier Bun Fernández Nº3 2ºBachillerato A